LOS 3 PASOS
Paso 1: El contenido.
8 de cada 10 blogueros admitirán que un buen blog necesita algún tipo de contenido, pero no nos engañemos, no tiene por qué ser original. Por supuesto robar cosas está feo, pero la mayoría de internautas no se van a molestar si se cita la fuente, así que no tienes más que ir poniendo un vídeo visto en Twitter por aquí, una viñeta de un webcomic por allá y ya tienes el contenido de tu blog asegurado. Podéis creerme, cada día se publican en internet suficientes cosas interesantes como para llenar varios blogs. Eso sí, ¡no olvides enlazar la fuente! Si no serás bastante mal visto por los demás, pues no está bien presentar como propio el trabajo de otros. Como dijo Alejandro Sanz: “Se empieza así, y se termina matando niños africanos” (o algo así).
Paso 2: Las visitas.
Con el paso anterior tenemos asegurado el contenido, pero nos falta algo muy importante: que la gente entre. Hace unos años esto resultaba harto complicado y en muchos casos requería perseverancia y contenido de calidad. Pero hoy, gracias a las redes sociales es realmente fácil. Me explico:
Lo primero que hay que hacer es crear grupos graciosos e interesantes de Facebook, de esos que reciben miles de “me gusta”. ¿Cómo conseguir crear un grupo tan exitoso? No temas, no tendrás que pensar demasiado. De hecho es bien sencillo: no tienes más que pasearte por Twitter. Casi todos los días se suelta alguna tontería realmente buena. Y como gran parte de la gente de Facebook no tiene Twitter (o no lo usa), cualquier grupo creado a partir de esa parida tendrá bastante éxito. Los Tweets no tienen copyright y sinceramente, nadie se va a molestar porque hagan un grupo de Facebook de uno de sus Tweets, si acaso se sentirá halagado: eso significa que su Tweet tenía gracia.
Una vez conseguidos tus “grupos de éxito” no tienes más que hacer que estos compartan cada nueva entrada de tu blog con sus seguidores. Si tienes 3 grupos de, pongamos 5.000 seguidores, calcula cuánta gente entrará en tu blog cada día. E imagina si alguno de estos grupos alcanza los 10.000 seguidores. Y te aseguro que en Twitter hay gente lo suficientemente genial como para tener ocurrencias tan populares.
-Oiga, con todos mis respetos, pero eso es spam y es molesto…
¿¿¿QUIÉN HA DICHO ESO??? No sé si sabes lo que es el spam, pero eso NO es spam. No se manda por mail y además si a alguien no le gusta no tiene más que bloquear las publicaciones de la página o mejor aún, no darle al “me gusta” y todos tan amigos.
Paso 3: La publicidad.
Esto es muy importante! Si olvidas este último pero vital paso, no ganarás ni un centavo. Lo último que tienes que hacer, por supuesto, es meter publicidad. Banners, anuncios… lo que más te guste. El caso es que cada visita te dé un poco de dinero. No te comprarás un Ferrari… pero oye, para no haberte levantado de la silla ni devanado los sesos en exceso no sé qué más quieres. Además, en el peor de los casos sólo cubrirás los costos de los servidores pero por lo menos tendrás un blog con miles de visitas, al nivel de otros blogs donde sus ingenuos autores sudan la gota gorda por ser originales, crear contenido e innovar cada día.
Es cierto que una página con estas características se escaparía un poco de la definición de blog. Al menos de la que yo tengo. Pero oye, yo he venido aquí a hablar de mi libro a ganar dinero, no a discutir de lingüística.
Y eso es todo. Si os funciona y queréis hacer una donación por mi inestimable ayuda, la destinaré a la conservación del hábitat de la oruga trompetista. Dicho esto, me retiro un rato a Twitter, a ver si “se me ocurren” grupos de Facebook graciosos.
